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Cuidar a los niños en edad de la escuela secundaria puede ser una tarea desafiante. El niño que pensaba conocer está cambiando rápidamente. Las técnicas de crianza que funcionaron durante años quizás ya no le sirvan. Aunque usted ama profundamente a su hijo/a, su nueva manera de manejarse en el mundo puede parecerle desconocida, extraña e incómoda.

Además de cuidar de su hijo/a, ahora es momento de enfocarse fuertemente en cuidar de sí mismo/a. Cuanta más atención le preste a sus propias necesidades, más di estará para su hijo/a. A continuación hay algunos ejemplos de cuidado personal que pueden ayudarle a criar a su joven maravilloso y desafiante.

  1. Terapia. La crianza puede hacer que recuerde sus traumas pasados, en especial lo que sea que haya experimentado durante su infancia. El trabajo de cuidado también puede consumirnos, especialmente durante los momentos de la vida de nuestros hijos en los que nos necesitan más que nunca. Hablar con un terapeuta profesional no solo puede ayudarle a comprender lo que está sucediendo, sino que también le ayuda a crear el hábito de destinar tiempo exclusivamente para usted y sus sentimientos. Tener un espacio para procesar sus sentimientos fuera de su hogar y comunidad es fundamental para mantenerse saludable a nivel mental mientras cría a sus hijos.
  2. Pase tiempo con sus amigos y familiares que le hacen sentir feliz, visto/a y apoyado/a. Este también podría ser un gran momento para hacer nuevos amigos que quizás estén atravesando los mismos desafíos de crianza que usted. Sepa que no siempre tiene que usar su comunidad para hablar sobre su hijo/a. Vaya a ver una película, salga a comer, dé una caminata o haga otra cosa que disfrute. Programar momentos para reunirse con familiares o amigos es una gran manera de destinar tiempo para usted mismo/a.
  3. Uno de los mayores desafíos durante los años de la escuela secundaria es ver a su hijo/a independizarse. Ya no lo/a necesitará de la misma manera o en la misma medida que antes, al menos en lo que se refiere a satisfacer sus necesidades físicas. Quizás encuentre que tiene tiempo o espacio que no ha tenido en años. Aproveche a quitar el foco en su hijo/a, aprendiendo un nuevo arte, uniéndose a un equipo deportivo o retomando una habilidad que no ha practicado durante años. Únase a un club literario, aprenda a tocar la guitarra o termine ese proyecto de tejido. Enfóquese en algo que sea completamente suyo, y que pueda usar para redireccionar la energía que alguna vez gastó en su hijo/a pequeño/a.
  4. Cuando la crianza es difícil, dormir es fundamental. Acuéstese a un horario habitual. Apague las pantallas una hora antes de ir a dormir. Intente dormir en una habitación tranquila y oscura. Cuanto más descanse, tendrá más lucidez y paciencia.
  5. Límites. Al igual que a los niños pequeños, es necesario establecer límites para los jóvenes en edad de la escuela secundaria. Pero recuerde que los límites son importantes para usted también. Establezca momentos del día para satisfacer sus necesidades. Pídale a su preadolescente que ayude con las tareas domésticas para que usted no tenga que hacer todo el trabajo. Deje en claro que ciertos tipos de errores, como olvidar entregar una tarea escolar o no tener dinero para gastos pequeños ya no son responsabilidad de usted. Esto no solo garantiza que su hijo/a en edad de la escuela secundaria sea independiente, sino que brinda ejemplos de comportamientos que le servirán en la edad adulta.